Los trabajadores son una pieza clave para cualquier empresa. Y su óptimo rendimiento depende, en gran parte, de la motivación. En este sentido, cada vez más compañías destinan una parte de su presupuesto a diferentes incentivos para su plantilla: seguros y productos de ahorro, flexibilidad horaria, viajes, tickets restaurantes, guardería, transporte, formación, abonos en gimnasios, suscripciones a plataformas online, entre otros.
De hecho, según un estudio reciente de una importante consultora, la mitad de los trabajadores españoles afirma que prefiere cobrar menos a cambio de recibir más beneficios sociales. Por ejemplo, valoran más contar con un plan de jubilación (57%), un seguro médico (45%) o programas de beneficios (35%), antes que un salario más alto o mayor bonificación.
No obstante, estos datos cambian dependiendo de la generación de trabajadores y del nivel salarial que tengan. En el caso de la generación de los boomers (50-64 años) y la generación Y o millennials (21-34 años) son los más favorables a recibir compensaciones, mientras que la generación X (35-49 años) prefiere un buen salario. Si se analiza desde el punto de vista económico, aquellos que ganan entre 25.000 y 50.000 euros mensuales, o superior, son los que más valoran los programas de beneficios sociales.
Tal como se desprende de estos datos, el seguro de salud colectivo, junto con los planes de pensiones de empresa, es uno de los beneficios sociales mejor valorado por los empleados. ¿A qué se debe? Los principales motivos para que la plantilla se decante por este tipo de productos se pueden sintetizar en:
Ventajas para los empleados
Acceso a una sanidad privada de calidad. Los empleados tendrán a su disposición toda una serie de incentivos como: una atención rápida y eficiente sin tener que estar horas y horas esperando para ser atendidos; podrán elegir médico o especialista entre un amplio cuadro médico; utilizar una habitación individual en períodos de hospitalización, eliminación de las listas de espera, entre muchas otras.
Beneficios para los familiares de los empleados. Prácticamente, todas las compañías ofrecen la posibilidad de ampliar la protección a familiares directos de los trabajadores en las mismas condiciones.
Favorece la conciliación familiar. Al reducir los tiempos de espera, ayuda a los trabajadores a optimizar su tiempo y mejorar la conciliación entre vida personal y laboral.
Deducción en el IRPF. Para los asalariados los primeros 500 euros al año están exentos en el IRPF y esta exención se extiende al cónyuge y descendientes de los trabajadores, sin límite de edad.
Puntos fuertes a nivel empresarial
Por otra parte, cada vez más empresas son conscientes de las ventajas de este tipo de pólizas. A efectos fiscales, se trata de un gasto deducible en el Impuesto de Sociedades. Por lo tanto, les sale mucho más rentable que llevar a cabo una subida salarial equivalente. Pero, además, también les supone otra clase de beneficios tan importantes como:
Reducción considerable del absentismo laboral. Con la utilización de la sanidad privada, los empleados tendrán acceso a revisiones periódicas y la atención ágil de muchas patologías, lo que ayudará a prevenir o incluso, reducir el tiempo en visitas o consultas médicas. Todo ello reducirá los tiempos de espera, los permisos y días de baja y, en definitiva, el absentismo laboral.
Aumento de la fidelización y compromiso del equipo. La apuesta por este tipo de beneficio social hará que los empleados se sientan mejor en su trabajo. Es decir, estarán más comprometidos y alineados con los objetivos empresariales. Por eso, se convierte en una importante herramienta para la retención de talento, ya que la plantilla que cuenta con un seguro de salud colectivo no suele querer cambiar de empleo.
Incremento de la productividad. Como hemos comentado, se trata de un elemento motivador, que acaba propiciando que los trabajadores sean mucho más productivos y eficientes.
Reduce desplazamientos y ausencias. Gracias a los avances en telemedicina, que han evolucionado de forma notoria, desde la irrupción de la pandemia, muchas pólizas de salud privadas permiten realizar un gran número de gestiones online, incluso realizar vídeo-consultas con médicos especialistas sin tener que salir de la oficina.
Programas de prevención en el ámbito laboral. Este tipo de iniciativas se ponen en marcha, con el objetivo de reducir el número de futuras bajas y mejorar la salud de los trabajadores, como principal activo de la empresa.
Mejora de la imagen y reputación de la empresa. Contar con un seguro médico refuerza la política de Responsabilidad Social Corporativa de la compañía. Aparte de retener talento, el negocio también será más atractivo para atraer nuevos candidatos.
En definitiva ofrecer este tipo de compensaciones, que forman parte de lo que se conoce como ‘salario emocional’, es una manera de demostrar que la compañía se preocupa por el bienestar de su equipo. ¿Tienes dudas sobre qué tipo de
seguro de salud colectivo es el más adecuado para tu empresa? Resuélvelas en
Grupo Bueso. Pondremos a tu disposición nuestros profesionales que estarán encantados de asesorarte e informarte sobre las opciones que más te convienen.
